Fuente: Efecto Cocuyo
Este Día de la Resistencia Indígena, el Comité de Derechos Humanos de la Guajira condenó la represión por parte de cuerpos de seguridad del Estado a la población wayuu durante protestas pacífica en Paraguaipoa, entre el 5 y el 7 de octubre.
A través de un comunicado este 12 de octubre, la ONG explicó que las comunidades decidieron alzar la voz por la falta de electricidad, de hasta dos días seguidos, así como por estar incomunicados y desinformados debido a que la estatal Movilnet tiene más de seis meses sin funcionar en la Región Guajira.

Crédito: Cortesía / Fe y Alegría
También reclamaban la falta de agua y gas doméstico, del desabastecimiento de insumos y medicinas, el incumplimiento de la entrega de la caja Clap y la imposibilidad de poder movilizarse a comedores alimentarios de las Naciones Unidas en la frontera colombiana, debido a la cuarentena por el COVID-19.
El Comité aseguró que los wayuu solicitaron a la alcaldesa Indira Fernández su presencia en el sector para dar respuesta a sus reclamos.
Sin embargo, solo apareció “la fuerza militar para reprimir y amedrentar a una población vejada y vulnerada en todos sus derechos”.
La ONG relató que la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) disparó perdigones y bombas lacrimógenas a los manifestantes en la Troncal de Caribe. Varios indígenas wayuu resultaron heridos, privados de libertad y hubo además “allanamientos sin orden judicial”.
Muchos se vieron desplazados forzosamente ante amenazas de persecución. El territorio de Paraguaipoa fue militarizado.
Indígenas detenidos
Reportaron la detención arbitraria de tres indígenas wayuu que fueron golpeados y heridos.
El 9 de octubre fueron trasladados a Maracaibo ante un tribunal que les dictó medida privativa de libertad en el Comando 112 de la GNB Puerto Guerrero, ubicado en la cabecera del puente sobre el río Limón del municipio Guajira.
La Fiscalía de flagrancia del Ministerio Público les imputo los delitos de incitación al odio, obstaculización de vías
públicas y violación al decreto presidencial.
La organización aseguró que este ataque “responde a un patrón sistemático de represión contra los indígenas wayuu que pretende crear un estado de miedo y terror”.
Exigieron la liberación de los detenidos, el respeto a la protesta pacífica y atención urgente a la emergencia humanitaria compleja que vive la Guajira venezolana.