Bogotá. El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Freddy Padilla, desestimó hoy que las FARC vayan a implementar una estrategia de «guerra de guerrillas» y descartó una supuesta ofensiva de gran nivel. Padilla sostuvo en declaraciones a radio Caracol que un anuncio atribuido al máximo líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Alfonso Cano, a sus subalternos, no contiene nada novedoso y descartó una eventual gran ofensiva rebelde. En una carta enviada por Cano a sus hombres y divulgada este domingo por el diario El Espectador, el comandante de las FARC da a conocer 14 puntos sobre la nueva estrategia para combatir la política del presidente colombiano Alvaro Uribe Vélez. Dentro de las acciones que tomarían las FARC se encuentran la compra de misiles, la infiltración de las tropas y el acercamiento a países vecinos. «Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia están muy disminuidas y les ha pasado lo peor que le puede pasar a cualquier organización de este tipo: el desprecio del pueblo», dijo Padilla. Cano, según la fuente, propuso la creación de un fondo de seis millones de dólares para rearmar sus frentes y aumentar los ataques terroristas y el uso de campos minados contra el Ejército de Colombia. «Me parece que son alucinaciones. Encontramos a un ‘Mono Jojoy’, el hombre otrora todo poderoso, el hombre que ordenaba movimientos de millones de dólares, pidiendo prestamos a un narcotraficante de los Llanos Orientales como ‘El Loco’ Barrera», comentó el oficial. Padilla, sin embargo, reconoció que las FARC pretenden establecer contactos internacionales para legitimar su accionar, estrategia que también contempla la formación de un «partido del pueblo» que buscaría una alianza con movimientos bolivarianos. «Las FARC intentan tratar que gobiernos amigos de Colombia, vecinos incluso, tengan algún tipo de relación con ellos porque eso los fortalecería indudablemente y les daría una mano en el ahogamiento en el que se encuentran en este instante», comentó. Aclaró, sin embargo, que «una cosa es la intención de las FARC y otra la decisión de los gobiernos» de los países vecinos respecto del grupo rebelde. El oficial colombiano indicó que en la supuesta nueva estrategia de las FARC «no hay nada nuevo, están haciendo informaciones que no corresponden a una verdad». En el último año, las FARC perdieron a tres de los siete máximos dirigentes: Raúl Reyes, dado de baja por el Ejército en Ecuador; Iván Ríos, muerto por uno de sus lugartenientes, y Manuel Marulanda, fallecido aparentemente por causas naturales. Fuente: milenio.com