Fuente: El Carabobeño
Un recurso de apelación de la sentencia por la cual fue condenado a 26 años de cárcel introdujo Hannis Moreno, esposa del funcionario Eddien Alexander Romero, acusado por la muerte del joven Daniel Queliz en la urbanización Los Parques, al sur de la ciudad, durante las protestas de 2017.
Crédito: Carolina González
De visita en El Carabobeño, Moreno informó que el recurso de apelación fue introducido el 16 de noviembre de este año, sin que hasta el momento la Corte de Apelaciones se haya pronunciado.
La esposa del funcionario, quien tiene un defensor público, asegura haber actuado con base en el artículo 444 del Código Orgánico Procesal Penal, que establece las causales para la apelación de la sentencia definitiva, que es su caso.
Moreno se centró en las causales de contradicción o ilogicidad manifiesta en la motivación de la sentencia, pues según su parecer, si su esposo no disparó el arma que acabó con la vida del joven Queliz, no entiende por qué fue condenado a los mismos 26 años del funcionario cuya arma de reglamento fue la causante la muerte.
Hannis Moreno insiste en que su esposo fue condenado injustamente. «El estaba en ejercicio de sus funciones y su vida corría peligro pues estaba dentro del comando policial que estaba siendo atacado y ellos solo se defendieron. Allí estaba el parque de armas y había detenidos».
Apelada sentencia
Tanto Moreno, como Alexander Pérez, yerno de Eddien Romero, consideran la sentencia de la jueza injusta y parcializada. «Ella no tomó en cuenta que su arma no hirió a nadie y que solo estaba defendiendo la revolución, porque contrarrestaban las guarimbas que fueron las más fuertes, sobre todo en esa zona»
Por lo exagerada que consideran la condena de 26 años para Romero, «un funcionario del Estado abandonado por el presidente y por el gobernador Rafael Lacava», creen que Eddien Romero no es más que un chivo expiatorio para lavarle la cara al gobierno ante la Corte Penal Internacional, para decir que están cumpliendo con las leyes.
Hannis Moreno aseguró que en Venezuela no hay justicia.»Lo estoy viendo con mi esposo, si hubiera justicia se entendería que hay culpables, pero también inocentes, que hay gente con más responsabilidad que otros y en función de eso debió ser la condena. Se ensañaron con él como si hubiese sido una muerte intencional y no fue así».
Ambos exhortaron a que sea revisado el expediente, la sentencia y que se haga justicia.