A 17 días de la desaparición de la aeronave militar que sobrevolaba el Amazonas venezolano, los parientes no tienen noticias ciertas de las 13 personas que iban a bordo. Ahora, a su angustia se suma la orden militar de apartar de la búsqueda a todo personal civil, incluyendo a los indígenas que conocen de cabo a rabo el territorio en el que desapareció el helicóptero del Ejército tipo MI17V5 el 30 de diciembre de 2016.

Asimismo genera malestar la petición que hicieron a los familiares de no hablar con los medios de comunicación. La información fue suministrada por el padre de uno de los desaparecidos, Jesús Marcano, quien llegó a Puerto Ayacucho el 3 de diciembre, luego de que a los militares le avisaran el 1 de enero del siniestro.

“El Presidente solicitó ayuda a todas las organizaciones de búsqueda y rescate o personas que tengan a bien colaborar en la operación y resulta que hoy (15 de enero) el personal militar se cerró a todo tipo de ayuda no militar”, expuso Marcano.

Para el 11 de enero, el padre de Guillermo Marcano, informó que las operaciones de búsqueda y rescate (SAR, por sus siglas en inglés) habían arrojado una ubicación cerca de la comunidad Yanomami Cua, en la que se tenía la seguridad de que encontrarían los nueve militares y cuatro civiles perdidos, entre ellos una niña de cuatro años.

A los parientes que estaban allí les indicaron el fin de semana que un grupo de 60 militares se estaría preparando para descender sobre ese punto y realizar la extracción, según comentó a Efecto Cocuyo una fuente extraoficial.

El viernes 13 de enero, llegaron a Puerto Ayacucho los familiares de la tripulación (Griseldo Fernández Rumbo, Otto Joaquín Alvarado, Yiber José Mujica y Jonathan Inojosa). Estos fueron recibidos por los militares y llevados a la Sala de Operaciones para explicarles las acciones de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb); mientras que los parientes que tienen tres semanas en la zona esperaban reunirse con ellos. Ese encuentro no ocurrió, pues un bus privado los habría llevado de la sede militar al hotel Venetur Gran Amazonas.

“Me parece que quieren dividir a los familiares para que a la hora de decir la verdad se genere una duda razonable y sea más difícil establecer responsabilidades. Eso se conoce como operación psicológica”, manifestó Marcano, quien agregó que a estos los llevaron hasta La Esmeralda y sobrevolaron el terreno con ellos.

El cambio de giro tornó al grupo de familiares que tiene 15 días en Puerto Ayacucho más suspicaces: “El Ministro (de la Defensa) no ha venido nunca. Ahora me dejan pasar es hasta donde dicen que puedo y me dan cero información. Yo creo que ocultan algo muy grave”, denunció Marcano.

El presidente Nicolás Maduro pidió apoyo “a todo el que tenga un helicóptero y quiera participar voluntariamente, cubrimos los gastos que sean necesarios, para reforzar” la búsqueda del helicóptero desaparecido, dijo durante una cadena de radio y televisión del Ejercicio de Defensa Integral Antiimperialista Zamora 200, el sábado 14 de enero.

“Se han invertido 380 horas de vuelo y muchas de ellos en base a un gran riesgo”, dijo, explicando que que en los últimos días las nubes han estado muy bajas sobre la selva amazónica.

Marcano reconoce que las autoridades militares han realizado las labores correspondientes pero estas no llenaron sus expectativas. Por eso, este lunes 16 de enero se dirigió a la Defensoría del  Pueblo para solicitar apoyo en cuanto al acceso a la información sobre las operaciones SAR.