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30/03/08. Tolosa, España. El miembro de la Sociedad de Ciencias Aranzadi Mikel Errazkin se muestra “impresionado y sorprendido” de la repercusión que está teniendo el proyecto Tolosa 1936-1945. Recuperación de la memoria histórica entre los vecinos del municipio. Él es quien recibe testimonios, relatos y recoge datos sobre la Guerra Civil y los primeros años de la represión franquista en Tolosa en la oficina que se mantiene abierta en el palacio Aranburu. Vista la afluencia de vecinos, Aranzadi y el Ayuntamiento barajan la posibilidad de tenerla en funcionamiento más tiempo del inicialmente previsto, para que no se queden testimonios en el tintero. Los responsables del proyecto, que pretende esclarecer a base de datos y declaraciones los horrores de la Guerra Civil padecidos en la villa, están muy satisfechos con la repercusión y la acogida que está teniendo. Por ahora 27 personas se han decidido a contar lo que aún mantienen fresco en su memoria. “Para nosotros lo más importante es que ha venido gente de muchas tipologías, lo cual enriquece mucho el proyecto en diferentes sentidos”, destaca Mikel Errazkin. En muchos de ellos se denota la necesidad de contar lo que vivieron en sus propias carnes. Han llegado a la oficina personas que fueron exiliadas cuando eran niños y que hoy se encuentran en edad adulta, vecinos que permanecieron durante mucho tiempo en campos de concentración, hijos y nietos de personas que fueron fusiladas durante la guerra, y familiares de fallecidos, “de los dos bandos”, apostilla Errazkin. “Muchos de ellos no cuentan con documentos ni con datos, pero tienen la necesidad de contar lo que hasta ahora han mantenido en un ámbito familiar o íntimo. Lo más importante para nosotros es su testimonio directo”, cuenta el miembro de Aranzadi. Mikel Errazkin pasa más de dos horas con cada una de las personas que llegan a su oficina. Con los oídos bien abiertos y la grabadora en marcha, lo primero es escuchar bien lo que le cuentan. “Nosotros hemos hecho un trabajo previo de búsqueda de datos para tener una base sólida. Después, con estos testimonios lo que queremos es completar esa base de datos para dar forma a los números y ubicarlos en un contexto. Por eso, todo lo que nos cuentan lo contrastamos con los datos que tenemos para después poder elaborar un documento final”, destaca Errazkin.

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